Cuatro muertos y seis heridos graves es el balance que, por el momento, ha dejado el accidente de autobús que tuvo lugar este domingo cerca de la localidad de Porté-Puymorens, en el Pirineo francés. Viajaban 47 personas, por lo que otros 37 pasajeros sufrieron lesiones de diferentes grados. Al parecer, la mayoría eran vecinos de L’Hospitalet de Llobregat, de donde había salido el bus para ir a Andorra de compras con motivo del Black Friday.
En el viaje de vuelta, el conductor habría perdido el control del vehículo que ha impactado primero contra una cornisa y posteriormente ha volcado sobre la vía, provocando el corte de la carretera nacional francesa 320. Ha ocurrido sobre las 17:00 horas de la tarde. Desde el Sistema de Emergencias Médicas de la Generalitat catalana se activaron en un primer momento siete unidades terrestres, una de logística, dos mandos, un equipo de apoyo psicológico y un helicóptero medicalizado. También se han activado dos mandos a la Central de Coordinación Sanitaria. El hospital transfronterizo de Cerdanya, ubicado en Puigcerdà y cuya gestión comparten Francia y España, ha atendido a la mayoría de accidentados en el siniestro, mientras que otros han ido a hospitales franceses. La gestión del accidente ha recaído en las autoridades francesas al haber ocurrido en aquel país.
Salvador Illa afirmó en la noche estar siguiendo con «preocupación» el accidente, mientras mandaba condolencias a los familiares de las víctimas. También ha expresado que el Govern está a disposición de las personas afectadas y sus familias, así como su agradecimiento a los servicios de emergencia.
El alcalde de l’Hospitalet de Llobregat (Barcelona), David Quirós, también ha señalado su preocupación y ha dicho estar en contacto con la consellera de Interior, Núria Parlon, y de las autoridades francesas para conocer las circunstancias del suceso. El delegado del Gobierno en Cataluña, Carlos Prieto, también ha expresado su solidaridad con los afectados por el accidente.