Risto Mejide no sólo quería contar las experiencias sexuales de sus invitados, en ese Chester in love dominical que dedicó al mundo del sexo, sino también las que algunos no han tenido o 'catado' nunca, y para ello nada mejor que una religiosa como Sor Lucía Caram, que tampoco se calla nunca y que dice ir con la verdad por delante.
Así, la religiosa, después de recordar que «la Iglesia durante mucho tiempo ha tenido muy mala relación con el sexo y la tenía un poco bajo la alfombra. No era un tema tabú, sino un tema sucio, oculto y era la negación», precisó que «yo creo que es una bendición».
La argentina se remontó a otra época, «hay toda una tradición que viene desde el antiguo Testamento. Había que purificarse antes del culto, porque el sexo era malo», antes de valorar la actual situación de la Iglesia, «ha querido espiritualizar tanto el mensaje, que se ha llegado a negar la verdad más evidente, que es que somos un cuerpo. (…) Y el cuerpo se veía como malo, había que castigarlo».
Hasta habló de la Virgen María, «su caso entiendo que sea muy difícil de creer, pero creo que María estaba enamorada de José y era una pareja normal», e incluso indicó sobre si llegarían a algo más que besos o caricias que «lo normal era tener sexo en una relación normal de pareja», y por eso lamentó que «la ausencia de relaciones sexuales entre María y José hace poco creíble el mensaje».
Según ella, «Dios bendice la relación con el placer, no creo que sea malo. Lo que tendría que condenar es un placer a costa de otro», por lo que dijo que «cuánto daño hemos hecho por martirizar a la gente. Nos hemos dedicado durante mucho tiempo a condenar».
Sobre su experiencia en el mundo sexual, Sor Lucía puntualizó que «renuncié a la genitalidad», así como que «he renunciado a tener relaciones sexuales y a tener una pareja. (…) Pero sigo siendo mujer y sintiendo como siento», aunque añadió que «renuncio para estar liberada absolutamente por la causa que me apasiona».
De su época joven recordó que tuvo una experiencia amorosa, pero que «en el momento que renuncio, me di cuenta que no era mi proyecto», y valoró que cree haber actuado bien porque «él me hubiera cortado mucho las alas» (según contó, este hombre se casó con otra, aunque admitió que le gustaría saber de él, «fue una relación muy bonita y podríamos tener una relación muy buena ahora».
Y por si no había quedado claro todavía, y para responder a preguntas de invitados en el plató, Sor Lucía subrayó que «no he tenido relaciones sexuales y soy virgen, y tampoco me masturbo jamás, tengo que decirlo. Aunque las pulsiones suben y bajan y estás en un momento de plenitud de vida, tienes las fuerzas canalizadas».
M. A.