«Esas famosas albóndigas suecas que tomas en Ikea son en realidad turcas, admite el gobierno sueco», tuiteó TRT World, el canal de noticias de televisión internacional financiado con fondos públicos de Turquía.
Es solo una muestra del regocijo con el que en Turquía se han tomado una confesión oficial desde Estocolmo que reconoce que el plato nacional sueco es, de hecho, turco.
La cuenta nacional oficial de Twitter de Suecia, @swedense afirmó, sin que nadie se lo hubiera preguntado, «las albóndigas suecas en realidad se basan en una receta que el rey Carlos XII trajo a casa desde Turquía a principios del siglo XVIII», «¡Vamos a ceñirnos a los hechos!». El escándalo gastronómico esta servido y las risas turcas se han acompañado de no pocas depresivas declaraciones suecas.
La agencia Anadoly de Turquía aprovechó la oportunidad para investigar. EN su guerra con Rusia, el Rey Carlos y los restos de su ejército se refugiaron en lo que hoy es Moldavia, y luego parte del imperio otomano
Carlos, que accedió al trono en 1705 a la edad de 15 años, había sido derrotado en Rusia y pasó los siguientes seis años en el exilio en Turquía y sus alrededores.
En las cocinas, obtuvo las recetas de las albóndigas de carne que con el tiempo se convirtieron en el kötbullar básico sueco y, también del popular plato de repollo relleno ahora conocido en Suecia. como kåldolmar.
«Toda mi vida», tuiteó irónicamente un ciudadano sueco, ha sido una mentira. Un drama gastronómico recorre la vida sueca y anima la cocina turca.
D.L.