FACUA-Consumidores en Acción ha identificado una estrategia que ha desconcertado a los consumidores: en supermercados como Mercadona, Carrefour, Alcampo, Eroski y Dia, el formato de 750 mililitros de aceite de oliva virgen extra tiene un precio superior al de un litro, a pesar de contener un 25% menos de producto. Esta situación se produce en un contexto de descenso generalizado de precios del aceite, tras meses de encarecimiento.
Precios que no cuadran
La organización de consumidores realizó un análisis de precios el pasado 3 de diciembre y detectó discrepancias en todas las cadenas evaluadas. Por ejemplo, en Mercadona, una botella de un litro de aceite de oliva virgen extra marca Hacendado cuesta 6,75 euros, mientras que la de 750 mililitros asciende a 6,95 euros, 20 céntimos más cara pese a su menor contenido. Una situación similar ocurre en Carrefour, donde la botella de un litro cuesta 6,74 euros y el formato más pequeño alcanza los 6,95 euros.
Alcampo y Eroski también presentan la misma práctica: en ambas cadenas, el litro de aceite de oliva virgen extra cuesta 6,75 euros, pero el envase de 750 mililitros tiene un precio de 6,95 euros. En Dia, esta diferencia es aún más evidente: el litro cuesta 6,89 euros, mientras que el formato de 750 mililitros alcanza los 6,99 euros.
En el caso de Hipercor, el formato de un litro de la marca El Corte Inglés tiene un precio de 6,89 euros, frente a los 6,95 euros del formato más pequeño. La única diferencia entre los productos es el tipo de envase, ya que el de un litro suele ser de plástico, mientras que el de 750 mililitros se comercializa en cristal.
Un formato que gana protagonismo
El formato de 750 mililitros ha ganado popularidad en los últimos meses, coincidiendo con la crisis de precios del aceite de oliva. Durante este periodo, cadenas como Mercadona llegaron a retirar temporalmente el formato de un litro, entre diciembre de 2023 y febrero de 2024. Paralelamente, algunas cadenas sustituyeron las tradicionales garrafas de 5 litros por formatos de 3 litros, en un intento por ofrecer alternativas más asequibles en un momento de inflación.
Sin embargo, este formato más pequeño ahora se ha convertido en un producto significativamente más caro en relación al litro, una estrategia que ha despertado críticas por parte de los consumidores. FACUA advierte que esta práctica puede inducir a error a los clientes menos atentos, que podrían asumir que un envase más pequeño implicaría un menor coste.
Un pacto de precios tácito
FACUA también ha denunciado lo que considera un «pacto de no agresión» entre los principales supermercados en los precios de sus marcas blancas de aceite de oliva virgen extra. Según la organización, las principales cadenas mantienen precios prácticamente idénticos para este producto, lo que dificulta la competencia y limita las opciones para el consumidor.
El seguimiento diario de precios realizado por la asociación a través de su plataforma Super.FACUA.org ha permitido documentar esta coordinación en las bajadas de precios recientes. Aunque la competencia suele generar variaciones de precio entre cadenas, en este caso los ajustes se han producido de manera paralela, manteniendo las diferencias mínimas.
Envases y estrategias comerciales
La diferencia de precio también se relaciona con el tipo de envase. Las botellas de 750 mililitros, al estar hechas de cristal, tienen un coste de producción superior al de las de plástico. Sin embargo, FACUA señala que esta diferencia no debería ser tan significativa como para justificar precios más altos por un menor volumen de producto.
La estrategia de comercializar formatos más pequeños podría responder a la intención de las cadenas de reducir el impacto visual de los precios altos en los lineales, aunque esto ha generado una situación en la que el consumidor paga más por menos cantidad de aceite.
Más transparencia
FACUA ha solicitado a las cadenas de distribución una mayor transparencia en su política de precios y ha pedido a los consumidores que estén atentos al precio por litro que figura en las etiquetas. Además, la organización insta a las autoridades a vigilar estas prácticas comerciales, que podrían vulnerar los derechos de los consumidores.
Mientras tanto, los compradores tendrán que ser especialmente cuidadosos al elegir qué formato de aceite de oliva adquirir, en un mercado donde lo pequeño no siempre resulta más económico.