La del curso 2022/2023 fue la vuelta al cole más cara que se recuerda. Aunque este año algunos precios se han moderado, las familias seguirán dedicando una media de algo más de 400 euros por cada hijo.
El coste total por cada alumno depende de muchos factores. Alistar todo lo necesario para regresar a las aulas es más caro si se estudia en un colegio privado que en uno público, y el coste sigue incrementando a medida que los estudiantes van avanzando cursos.
La comunidad autónoma en la que se siguen los estudios también influye en el precio. La diferencia entre unas y otras puede llegar hasta los 100 euros.
En el curso 2022/2023 la Comunidad Valenciana fue la región en la que el coste de equipar a los hijos para la vuelta al cole resultó más caro, con una media de 459,58 euros por alumno. Seguida de Navarra (443,66 euros) y de Cataluña (436,43 euros).
En el extremo contrario se posicionaron Extremadura, Castilla-La Mancha y Castilla y León, con un coste medio de 378,16 euros, 382,69 euros y 382,76 euros, respectivamente.
El gasto de la vuelta al cole es inevitable para quienes tienen hijos, pero con un poco de planificación se puede conseguir ahorrar.
Hacer un presupuesto detallado
Hay objetos como los libros o los uniformes que hay que comprar sí o sí, aunque se pueden buscar alternativas de segunda mano que sean más económicas. Pero también hay gastos de los que se puede prescindir del todo o casi en su totalidad.
Para no gastar de más, lo que aconsejan los expertos es empezar la planificación haciendo un presupuesto detallado que incluya todos los elementos esenciales y fijando un límite de gasto para cada categoría.
Esto ayuda a evitar las compras por impulso, que siempre acaban suponiendo un gasto extra.
Reutilizar y reciclar
Cuadernos que se quedaron a medias del curso anterior, pinturas que todavía pueden servir, bolígrafos que pintan bien… En todas las casas existe una gran cantidad de material escolar que puede ser reutilizado.
También conviene revisar los uniformes del año anterior, porque es posible que todo o parte de los mismos se pueda reutilizar. Si no es así, lo que hacen cada vez más padres es preguntar a otros si tienen prendas de hijos más mayores que ya no vayan a necesitar. Se crea así una economía circular que ayuda a ahorrar dinero y recursos.
Comprar de segunda mano
La segunda mano cada vez tiene más peso en la vuelta al cole. Artículos como los libros de texto y los uniformes son los grandes protagonistas en estas fechas en las aplicaciones de anuncios de compraventa.
No obstante, el ahorro no puede anteponerse a todo. Un libro de texto o un uniforme son elementos importantes para la educación de los niños y, por eso, antes de adquirir estos artículos de segunda mano, es conveniente asegurarse de que están en un estado óptimo para ser utilizados durante un curso más.
Comprar con antelación
En la vuelta al cole, anticiparse suele ser una buena manera de ahorrar algo de dinero. Organizar las compras con suficiente antelación es útil para encontrar artículos a un precio más barato y repartir el coste total.
Algunos padres aprovechan el mes de junio, en el que los artículos de papelería suelen estar de oferta por ser temporada baja, para adquirir folios, cuadernos, bolígrafos, etc.
Si no ha sido posible comprar con anticipación, no es bueno precipitarse, porque las prisas incentivan las compras por impulso.
Queda tiempo suficiente para organizar la vuelta al cole con tranquilidad, así que se pueden comparar precios y buscar ofertas.
Dejar gastos para más adelante
Algunos elementos hacen falta prácticamente desde el primer día de cole, pero otros pueden esperar.
Si hacer ahora el desembolso en muchas cosas es un problema para la economía doméstica, se puede espaciar el gasto.
Por ejemplo, las primeras semanas de septiembre y octubre suelen ser cálidas, por lo que no hace falta comprar ya calzado otoñal. Los niños pueden acudir a clase durante las primeras semanas del curso con unas zapatillas de verano.
Comprar «uniformes» para los niños que no llevan uniforme
En el caso de estudiantes que no necesitan utilizar uniforme, el gasto en ropa a lo largo del año puede llegar a dispararse.
Una forma de ahorrar es comprar una serie de prendas básicas que se puedan combinar entre sí y que permitan lucir diferentes estilismos a lo largo de la semana. Con un par de pantalones vaqueros, un par de pantalones deportivos, camisetas básicas y sudaderas, es más que suficiente.
No llevar a los niños a comprar el material escolar
Aunque muchos niños se muestran particularmente emocionados con la vuelta al cole y están deseando estrenar el material nuevo, no es buena idea llevarlos en el momento de hacer las compras.
A estas alturas del año todo está dispuesto en las grandes superficies para atraer la atención de los niños y despertar en ellos el deseo de tener nuevos rotuladores, carpetas y mochilas, entre otras cosas.
Para que los caprichos de última hora no se conviertan en un motivo de disgusto para padres e hijos, y para ahorrar, lo mejor es que los niños no acudan cuando se están haciendo compras de material escolar.
Estrenar sin gastar demasiado
El momento de estrenar nuevas carpetas, los cuadernos y los libros siempre hace especial ilusión a los estudiantes, y el tener un presupuesto ajustado para afrontar la vuelta al cole no debería privarles de esto.
Lo que proponen los especialistas es reconvertir el material de años pasados en algo totalmente nuevo. Por ejemplo, con un poco de papel de regalo y forro adhesivo para libros, una vieja carpeta puede convertirse en un modelo totalmente nuevo. Con unos parches, una mochila vieja y desgastada puede lucir un aspecto totalmente renovado.
La vuelta al cole es un gran gasto para las familias, pero planificándola con tiempo se puede conseguir un ahorro importante.