Carlos Cuerpo, ministro Economía, Comercio y Empresa, se ha reunido esta semana con representantes de Alemania, Francia, Italia, Polonia, Luxemburgo y Países Bajos para presentar de forma oficial el Laboratorio Europeo de Competitividad.
Se trata de una herramienta que tiene como objetivo avanzar en la integración de los Estados Miembros y conseguir movilizar financiación privada a iniciativas de interés europeo, contribuyendo así a la autonomía estratégica de la Unión.
Origen de la iniciativa
El Laboratorio Europeo de Competitividad surge como parte del legado de la presidencia española del Consejo de la Unión Europea en el segundo semestre de 2023. Durante ese periodo, el Ejecutivo español promovió diversas iniciativas para reforzar la autonomía estratégica abierta de Europa, así como para fomentar la cohesión económica y social. Una de las principales prioridades fue precisamente reactivar los debates sobre el futuro del mercado interior y su papel en la competitividad global de Europa.
Según fuentes del Ministerio de Economía, Comercio y Empresa, el laboratorio se concibe como un espacio permanente de análisis y propuesta de políticas públicas que permitan a la UE anticiparse a los retos estructurales que afectan a su competitividad.
«Esta reunión supone un hito importante en materia de gobernanza de la Unión Europea, que nos dota de mayor agilidad y favorece la integración», dijo el ministro de Economía, Comercio y Empresa en la reunión del pasado lunes. «Es el momento de ser ambiciosos y actuar de manera determinada para responder juntos a los desafíos que enfrenta la UE».
Objetivos del Laboratorio de Competitividad
Esta entidad tiene como finalidad generar un diagnóstico continuo sobre los factores que influyen en la capacidad competitiva del continente. Para ello, se propone analizar elementos como:
- El acceso a la financiación empresarial y el desarrollo del mercado de capitales europeo.
- La evolución de la productividad en los distintos sectores económicos.
- La integración del mercado interior.
- La innovación tecnológica y digitalización industrial.
- Las transiciones energética y ecológica.
- La capacitación y movilidad del capital humano.
Además, el laboratorio buscará detectar barreras normativas y administrativas que impidan la libre circulación de bienes, servicios, personas y capitales. Para ello, se apoyará en una red de expertos, centros de pensamiento, instituciones europeas y agentes económicos de los distintos países miembros. También trabajará en coordinación con la Comisión Europea, el Comité Económico y Social Europeo y el Parlamento Europeo.
Metodología y funcionamiento
La propuesta española contempla que el laboratorio adopte una estructura modular, con equipos de trabajo especializados por área temática. Cada módulo elaborará informes periódicos, estudios comparativos y recomendaciones de política económica que serán compartidos con los órganos legislativos y ejecutivos de la UE.
Asimismo, se prevé la organización de foros anuales de competitividad, donde se presentarán los avances del laboratorio y se abrirá el debate público con representantes de la sociedad civil, el sector empresarial y las administraciones nacionales.
La idea es que funcione bajo un modelo de gobernanza inclusivo, con una presidencia rotatoria y una secretaría técnica permanente con sede en España.
Debido a la dificultad que supone conseguir grandes pactos entre los 27 Estados Miembros, Cuerpo planteó llegar a acuerdos pequeños entre un mínimo de tres países, de manera que esto permita avanzar en propuestas legislativas.
Los primeros proyectos
La primera reunión entre los Estados implicados en esta iniciativa ha servido para establecer las líneas maestras de cara a lo que será el primer gran proyecto de inversión paneuropea.
Los primeros proyectos en los que se va a trabajar están estrechamente relacionados con la capacidad de ahorro en Europa y que esta se pueda destinar a proyectos que otorguen más autonomía estratégica y más seguridad económica al Viejo Continente.
Otro proyecto que podría tratarse próximamente es la creación de una normativa común para la calificación de las pymes.
Vinculación con otras iniciativas europeas
El Laboratorio de Competitividad está también vinculado con otras propuestas recientes orientadas a reforzar el tejido productivo europeo.
Destacan entre ellas el Plan Industrial del Pacto Verde Europeo, centrado en la sostenibilidad; la Estrategia para la Soberanía Tecnológica de Europa, que busca reducir la dependencia tecnológica de terceros países y la Nueva Agenda para la Competitividad Europea.
Además, el Ejecutivo ya ha dado los primeros pasos para conseguir que el Laboratorio se incluya en la próxima revisión de la agenda estratégica de la UE para el período 2025-2030.