El Partido Popular ha logrado ganar las elecciones generales del 23 de julio en España, aunque sin lograr mayoría absoluta. En Andalucía también ha conseguido la victoria, logrando al fin superar al PSOE (25 escaños populares frente a 21 socialistas) en unas generales después de haberlo hecho tanto en las autonómicas en 2022 como en las municipales el pasado 28 de mayo. Esta victoria se ha producido, entre otros factores gracias al sorpasso visto en Cádiz cuando el PP ha adelantado en votos al PSOE, lo cual ha cambiado por completo el mapa político en Andalucía y, a la postre, en España.
Una gran expectación anticipaba estas elecciones generales del 23 de julio en lo que respecta al territorio andaluz. De entrada, en las solicitudes de voto por correo se registraba un nuevo récord de 377.678 votos, un 93,98% del total de los solicitados – una consecuencia inequívoca del hecho de haberlas adelantado al mes de julio, cuando muchos andaluces ya están de vacaciones como ocurre con miles de españoles. Andalucía ha aportado buena parte del total de 2,47 millones de españoles que han votado por correo de cara a estos comicios.
Durante la jornada de reflexión, los principales políticos andaluces decidieron descansar junto a sus familias, a quienes apenas han visto desde el comienzo de la campaña electoral (que a su vez siguió a la precampaña del 23J y a su vez a la campaña y precampaña del 28 de mayo). Además, muchos debían permanecer en esas zonas dado que han de votar en los colegios electorales asignados. Así, Juanma Moreno se desplazó hasta Málaga (si bien ya había realizado mítines allí y el mismo viernes del cierre de campaña electoral pasó por la provincia) y Juan Espadas hizo lo propio en Sevilla capital. Otros dirigentes políticos andaluces hicieron lo propio en otras provincias como Cádiz, Málaga o Granada.
Los mensajes y el tono ya son conocidos al haberse repetido una y otra vez durante los últimos quince días. El PP, llamando a la confianza y al voto seguro para cargar contra Sánchez y echarle del Gobierno “de una vez por todas” así como a sus socios que tratan de romper España. Mientras tanto, el PSOE ha mantenido el mensaje de apostar por ellos para no retroceder en derechos sociales y volver a una España más oscura, cargando tanto contra los populares como contra la extrema derecha.
Otros partidos, como Vox o Sumar, tratan de romper el bipartidismo como ya lograron hacer allá por 2015 Podemos y Ciudadanos, si bien aún demuestran estar muy lejos de tener las cifras necesarias para ello pese al crecimiento de los de Abascal en Andalucía el 28 de mayo. En cambio, Adelante Andalucía tiene como única misión asegurar una voz andaluza y para los andaluces en el Congreso de los Diputados, de modo que ha aunado fuerzas para tener sólo en la provincia de Cádiz la lista más fuerte posible.
Votos de Juan Espadas, Juanma Moreno y demás líderes políticos en Andalucía
Entre las 9:00 y las 9:24 de la mañana se habían constituido el 100% de las mesas electorales de toda Andalucía. Es decir, 3.748 colegios electorales diferentes repartidos por las 8 provincias (que suman en total 785 municipios), un total de 10.280 mesas electorales con 30.840 miembros. Tal como reflejan los datos del Ministerio del Interior, el operativo de seguridad se formaba por 18.636 agentes – 9.496 de la Policía Nacional, 6.590 de la Guardia Civil y 2.550 de la Policía Local.
Tal como adelantó Europa Press, el líder de la oposición y secretario general del PSOE Andalucía Juan Espadas fue el primero en votar, haciéndolo sobre las 10:30 de la mañana en el colegio Calvo Sotelo de Sevilla. El resto de la jornada seguirá el avance del escrutinio de los votos desde la sede regional del partido en la calle San Vicente. El presidente de la Junta de Andalucía, en cambio, lo hizo en el colegio Sagrado Corazón de Jesús en Málaga a las 11:00 al estar censado allí y tras haber pasado tiempo con su familia.
A continuación Moreno se trasladó hasta Sevilla para seguir el resto de la jornada electoral desde la sede regional en la zona de San Benito de la capital hispalense, tal como ha hecho en otros comicios electorales recientes. Por otro lado, Manuel Gavira (Vox) votará y seguirá el proceso desde Cádiz capital al igual que lo harán Teresa Rodríguez y Pilar González, portavoz y candidata de manera respectiva de Adelante Andalucía. Toni Valero, coordinador general de Izquierda Unida Andalucía, lo hará desde Málaga (al igual que Ernesto Alba, coordinador de Sumar en Andalucía) mientras que la coordinadora de Podemos Andalucía, Martina Velarde, seguirá la jornada desde Granada.
El resto de altos cargos políticos en Andalucía realizaron sus votos también en horas similares en los respectivos colegios electorales, repitiendo una estampa visual similar a la que se vivió hace algo menos de dos meses. Fue el caso, por ejemplo, de María José García-Pelayo, alcaldesa de Jerez de la Frontera y número 2 del Partido Popular para el Senado por Cádiz que realizaba su voto en el colegio María Auxiliadora de Jerez (casualmente el mismo en el que también vota Mamen Sánchez, su antecesora en el cargo y oposición en el ayuntamiento jerezano por el PSOE).
Cierto era que hacía menos de dos meses que la ola conservadora se había hecho notar en Andalucía, así como en el resto de comunidades autónomas – impulsando las alcaldías del Partido Popular y la influencia de Vox en detrimento del férreo control que mantenía hasta entonces el PSOE con más de la mitad de los ayuntamientos bajo su mandato. No obstante, en el caso de las generales era un caso bien distinto, al contar con carácter nacional en lugar de municipal – algo que esperaban sobre todo desde el PSOE que les diera un resultado más favorable con respecto a mayo.
Diferencias en las horas de votación
Los 6.669.596 andaluces que residen en la comunidad autónoma (así como los 269.380 registrados que residen en el extranjero provenientes de Andalucía) tenían un papel grande ya no solo para Andalucía, sino para toda España en estas elecciones generales. Y es que Andalucía es la comunidad autónoma que más diputados aporta para el Congreso de los Diputados con un total de 61 diputados, así como 32 senadores. Históricamente, la participación electoral en Andalucía en las generales se ha mantenido entre el 68% y el 79% desde el inicio de la democracia.
Los ya mencionados 2,47 millones de españoles que votaron por correo suponía un récord del doble de lo registrado en elecciones anteriores – esto implicaba que el escrutinio se retrasaría hasta más tarde de lo habitual. En Sevilla y Córdoba hubo algunos incidentes como ataques de ansiedad y problemas relacionados con la calor reinante en estas provincias durante el mes de julio.
Debido a las altas temperaturas y el hecho de ser en verano, muchos ciudadanos fueron a votar en las primeras horas de la mañana – en términos generales se produjo un incremento del 2,56% en la participación en las primeras horas de la jornada (hasta el 40,48%) y un descenso del 3,73% (hasta el 53,12%) en el tramo hasta las 18:00. En el caso de Andalucía era de un 42,05% desde las 09:00 hasta las 14:00 (un incremento del 6,25% respecto al 35,80% de las generales de 2019) y un 53,18% hasta las 18:00 (un descenso del 1,67% frente al 54,85% en 2019).
Evolución del escrutinio
En el primer 10% de los votos, la balanza se inclinaba a favor de los socialistas tanto en el resto de España como en Andalucía. De hecho, los vaticinios de Espadas en lo que respecta a la diferencia entre las municipales y las generales se materializaba, con Sevilla y Cádiz dando el liderato al PSOE – de hecho, un liderato que le colocaba en cabeza ya no solo en Andalucía sino en toda España. El PP, pese a estar por detrás, demostraba estar mucho más cerca que en las generales de 2019 – si se sumaban las fuerzas de izquierdas y derechas (PSOE y Sumar vs PP y Vox) las diferencias eran mínimas.
Antes de llegar al 60% del escrutinio el PP seguía remontando, con tan solo un escaño de diferencia con los socialistas (frente a los 10 de diferencia de hace cuatro años). El efecto del voto directo de Moreno funcionaba, pues la Vox liderada por Gavira perdía tres escaños con respecto a 2019 mientras que Sumar sumaba cinco en Andalucía. En Huelva, Málaga, Córdoba, Granada y Jaén había empate entre las dos grandes fuerzas – solo Almería estaba claramente posicionada a favor de los populares en Andalucía.
Una vez el escrutinio se acercaba al 60%, el PP tomaba la delantera con tres escaños de ventaja sobre el PSOE a la par que Vox, pese a la clara caída, se mantenía por delante de Sumar. El mapa había cambiado por completo, con una clara dominancia del PP, también en Andalucía. Sólo en Canarias, Ceuta, Cataluña, Navarra y Asturias estaba el PSOE a la cabeza, con Cantabria, Mallorca y Extremadura en empate entre ambas fuerzas. En Andalucía se había producido sorpasso en la provincia de Cádiz, cambiando por completo el mapa político.
Cuando el escrutinio llegaba al 90%, el PP ya contaba en España con 136 escaños en el Congreso frente a los 122 del PSOE, los 33 de Vox y los 31 de Sumar – eso sí, lejos de los 176 de la mayoría absoluta. En Andalucía, los 25 escaños obtenidos le daban la victoria a los populares frente a los 21 del PSOE, cifras similares a las que vaticinaban las previsiones de Sigma Dos.
Este número de escaños se ha mantenido hasta el final, de modo que el PP gana las elecciones pero sin la mayoría necesaria para gobernar incluso con Vox – el PSOE, por tanto, aguanta aunque necesitaría la ayuda de partidos como Bildu o incluso ERC, si bien Carles Puigdemont ya afirmó que no apoyaría ni al PP ni al PSOE, a menos que – como Sánchez – cambie de opinión. Este resultado lleva a la posibilidad de unas nuevas elecciones generales.
Es la tercera victoria que logra el PP en Andalucía en unas generales mientras que los socialistas ceden terreno, pero se mantienen fuertes en la provincia de Sevilla para alegría de Espadas y los suyos. Vox pierde terreno y Sumar logra un resultado similar al de Unidas Podemos (6 escaños) en los comicios de 2019. Adelante Andalucía, por su parte, se ha quedado muy lejos del objetivo de conseguir al menos un escaño en Madrid para los andaluces.
En el Senado
Ya desde los primeros escrutinios, el PP estaba ligeramente en cabeza, cinco escaños por delante del PSOE en una situación que daba la vuelta a la tortilla con respecto a lo observado en 2019. No era el caso en Andalucía, con el PSOE manteniendo la hegemonía con casi el doble que el PP, copando ambos partidos cada uno de los 32 puestos del Senado pertenecientes a Andalucía.
Con el 55% del escrutinio, el PP mantenía esa ligera ventaja, 109 senadores frente a los 83 del PSOE, llevándose PNV, los independentistas y Sumar las plazas restantes. En tierras andaluzas, el balance era de 17 a 15 a favor de los populares – cuando se superaba el 82%, la balanza se tornaba 21 a 11 a favor del PP, balanza que se mantuvo hasta el final. Los populares salían ganadores en todas las provincias salvo Sevilla y Huelva.