El próximo lunes, a las 17:00 horas, el Congreso de los Diputados será testigo de un esperado encuentro. Pedro Sánchez, presidente del Gobierno en funciones y líder del PSOE, se sentará a dialogar con Alberto Núñez Feijóo, presidente del Partido Popular (PP). Ambos líderes políticos tienen una amplia agenda de temas a abordar, desde las recientes negociaciones de gobernabilidad hasta la tan debatida ley de amnistía.
El acercamiento de Sánchez con distintas fuerzas políticas no es nuevo. Recientemente, mantuvo una reunión con Yolanda Díaz, líder de Sumar y actual vicepresidenta segunda del Gobierno. En dicho encuentro, ambas figuras acordaron «acelerar la negociación para cerrar un pacto de gobierno» para octubre, lo que refleja la urgencia de las actuales circunstancias políticas.
No obstante, la reunión con Feijóo se presenta en un contexto particularmente tenso. El debate sobre la ley de amnistía, que Junts y ERC consideran fundamental para respaldar una investidura de Sánchez, es una de las principales preocupaciones. Sánchez ya ha confirmado públicamente que hay «negociaciones» en curso sobre este asunto.
Desde el PP, Feijóo tiene una postura clara al respecto. Durante el encuentro, hará saber a Sánchez su «absoluto rechazo» a que la estabilidad del país quede «condicionada a las exigencias del independentismo y suponga la ruptura de la igualdad de todos los españoles». De igual manera, desde el PP se enfatiza que la mencionada ley «no puede ser moneda de cambio» para la continuidad de Sánchez en el Palacio de la Moncloa.
Uno de los temas clave que Sánchez espera tratar es el de la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). Fuentes cercanas indican que Sánchez instará a Feijóo a que «levante el veto» sobre este asunto, considerado por muchos como «algo muy serio y urgente».
Feijóo planea cuestionar directamente al líder del PSOE sobre las negociaciones que su partido está llevando a cabo para mantenerse en el poder, en especial después de no haber logrado una victoria en las últimas elecciones. El líder del PP no olvida la propuesta que hizo al PSOE, una oferta de «un acuerdo de gobernabilidad basado en la centralidad y la moderación», que fue declinada. Así, se espera que el PP mantenga un voto negativo frente a la investidura de Sánchez.
Por último, el presidente del PP también tiene previsto pedir a Sánchez que inste a la presidenta del Congreso, Francina Armengol, a establecer una fecha concreta para el debate de investidura. Hace mención a que, a pesar de que la investidura de Feijóo se determinó «en 24 horas», el proceso con Sánchez lleva ya varios días sin una fecha clara.