El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado que se reunirá con el líder opositor venezolano Edmundo González Urrutia a su regreso de un viaje oficial a China, destacando que su acogida en España responde a un «gesto de humanidad».
Durante una conversación informal con periodistas en su viaje, el jefe del Ejecutivo reconoció que la situación de González Urrutia es «complicada» y consideró que es «evidente» el difícil contexto en el que se encuentra. González Urrutia, que lidera la Plataforma Unitaria Democrática (PUD) de Venezuela, llegó a España por petición propia el pasado domingo, coincidiendo con el viaje de Sánchez a Pekín. Sánchez expresó su intención de reunirse con él esta semana para conocer más detalles sobre su situación y la de su familia. Dependiendo de su llegada a Madrid el jueves, el encuentro podría darse ese mismo día o el viernes.
Negociaciones sobre la salida de González Urrutia
Varios ministros del Ejecutivo han rechazado las acusaciones de «negociación política» en torno al asilo de González Urrutia. Fuentes gubernamentales confirmaron que Sánchez se reunirá con el opositor venezolano entre el jueves o viernes, reiterando que España ha sido la voz «más clara y más dura» al exigir las actas de votación de las elecciones presidenciales de Venezuela, celebradas el 28 de julio.
Además, el Gobierno ha ofrecido apoyo similar a María Corina Machado, líder del partido opositor Vente Venezuela. En respuesta a las críticas del PP, las fuentes calificaron su postura de «cinismo e hipocresía», afirmando que aunque defienden públicamente la causa, la utilizan «como arma política».
Por su parte, Esteban González Pons, vicesecretario de Institucional del PP, afirmó que la presencia de Edmundo González en España no beneficia a la democracia, sino que más bien «le quita un problema a la dictadura de Maduro».
Las tensiones entre el Ejecutivo venezolano y la PUD surgieron después de que esta última publicara una web donde aseguraban que «el 83,5 % de las actas electorales» indicaban una clara victoria de la oposición, denunciando fraude por parte del Consejo Nacional Electoral (CNE).
A raíz de estas denuncias, González Urrutia fue imputado y se emitió una orden de captura en su contra. Sin embargo, no fue arrestado.