El juez encargado de investigar al exdirigente de Sumar, Íñigo Errejón, por un presunto delito de agresión sexual, ha adoptado un protocolo de seguridad a petición del abogado de la actriz Elisa Mouliaá. Esta medida busca evitar que ambos coincidan durante las comparecencias en los juzgados, garantizando que la denunciante y el investigado esperen en platas distintas para prevenir cualquier contacto visual.
Según fuentes jurídicas, este procedimiento es común en casos de esta índole y tiene como objetivo proteger la integridad emocional de la denunciante. El propio magistrado comunicó esta decisión tanto a la defensa de Errejón como al abogado de Mouliaá, asegurándose de que el político estuviera informado al respecto.
El relato de la actriz: una denuncia de hechos graves
En su declaración, Elisa Mouliaá describió los hechos ocurridos en septiembre de 2021. Según el documento presentado ante la Unidad de Familia y Mujer de la Policía Nacional (UFAM), tras un año de intercambio de mensajes en redes sociales, Errejón invitó a la actriz a la presentación de su libro. Después del evento, ambos acudieron a un bar cercano y posteriormente a una fiesta en casa de un amigo de Mouliaá, donde, según su relato, ocurrieron los episodios denunciados.
Mouliaá afirma que en el trayecto al domicilio de su amigo, Errejón mostró una actitud dominante y que en el ascensor la habría agarrado de la cintura para besarla de forma violenta. Durante la fiesta, tras interactuar con otros asistentes, asegura que el político la llevó a una habitación donde se produjeron varios tocamientos no consentidos.
En la denuncia, Mouliaá detalla que el político le quitó el sujetador, profirió frases de carácter sexual y continuó con comportamientos que ella calificó como «muy violentos», pese a manifestar su incomodidad en varias ocasiones. La actriz concluyó su relato recordando que, al resistirse, le reprochó al político su actitud, citando la frase: “Íñigo, ‘solo sí es sí’, parece mentira que me esté pasando esto contigo».
El contexto legal del caso
Las acusaciones presentadas podrían constituir un delito de agresión sexual, castigado con penas de entre 1 y 5 años de prisión. Fuentes cercanas al caso subrayan la gravedad de los hechos relatados y la importancia de garantizar una investigación exhaustiva.
Por su parte, Elisa Mouliaá llegó a los juzgados por una entrada trasera, evitando a los medios de comunicación. Más tarde, salió brevemente acompañada de su abogada antes de regresar al interior para iniciar su declaración, que comenzó a las 11:11 horas.
El procedimiento judicial continúa contra Errejón
El juez Carretero continúa instruyendo el caso mientras se esperan nuevas declaraciones y pruebas que puedan arrojar luz sobre los hechos denunciados. Por el momento, Íñigo Errejón no ha realizado declaraciones públicas respecto a esta acusación, mientras que su equipo legal trabaja en la estrategia de defensa ante los señalamientos.
La resolución de este caso no solo será clave para el ámbito judicial, sino que también marcará un importante precedente sobre la protección de los derechos de las víctimas en procesos relacionados con la violencia sexual.
Declaraciones de Íñigo Errejón
Por su parte, el exportavoz de Sumar acudió a los juzgados afirmando que este era «un día muy esperado» y que acudía «a defender su inocencia«. Ante los medios, aseguró que confiaba plenamente en la justicia y que su declaración se centraría en el ámbito judicial, sin dar detalles adicionales a la prensa.