La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha dado inicio este martes a la ronda de contactos con los grupos parlamentarios en la Real Casa de Correos, con motivo del inicio del nuevo año legislativo. En esta primera jornada, la dirigente regional ha mantenido encuentros con los portavoces del PP y del PSOE, Carlos Díaz-Pache y Jesús Celada, respectivamente, con el objetivo de abordar algunos de los temas clave que marcarán la agenda política de la región, como la oferta de vivienda, la educación y la inversión en dependencia.
Acompañada por el consejero de Presidencia, Justicia y Administración Local, Miguel Ángel García Martín, la presidenta ha defendido la gestión de su gobierno en materia de servicios públicos, destacando que los presupuestos actualmente en vigor permitirán “seguir fortaleciendo los servicios públicos de máxima calidad, con la mejor Sanidad de Europa, una educación bilingüe excelente y unos servicios sociales con la mayor red de atención a la dependencia de España”.
En este sentido, en la rueda de prensa posterior a las reuniones, García Martín ha asegurado que uno de los temas que ha generado mayor divergencia durante el encuentro con el portavoz del Grupo Socialista ha sido la política de vivienda, dado que, mientras el Gobierno madrileño apuesta por incrementar la oferta habitacional a través del Plan Vive, el PSOE insiste en la necesidad de desbloquear “cuanto antes” la Operación Campamento, un proyecto urbanístico impulsado por el Gobierno central que contempla la construcción de miles de viviendas en terrenos del Ministerio de Defensa.
“Nosotros estamos convencidos de que las políticas que está abordando el Gobierno de la Comunidad de Madrid en materia de vivienda son las que necesita nuestra región, son las que necesita nuestro país. Necesitamos más oferta de vivienda en nuestra región y el Plan Vive está funcionando”, ha defendido el consejero, reiterando sus críticas a la Ley de Vivienda nacional que ha calificado como “nociva”.
El PP impulsa una comisión de estudio sobre el impacto de las drogas en la región
Por su parte, el portavoz del PP en la Asamblea de Madrid, Carlos Díaz-Pache, ha anunciado la creación de una comisión de estudio destinada a evaluar el impacto de las drogas en la Comunidad, con un enfoque particular en el consumo juvenil. Una iniciativa que será registrada en los próximos días y que se prevé que comience a funcionar en marzo, con una duración de un año, bajo el marco del recién aprobado Plan Regional contra las Drogas.
“Queremos saber las consecuencias reales en la vida de los afectados por la drogodependencia y sus familiares, las cosas que lo provocan, el impacto en su vida, el negocio que hay detrás de ellas”, ha puntualizado.
Para ello, el PP prevé la participación de expertos en salud y educación, representantes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y testimonios de víctimas y familiares, con el fin de obtener un diagnóstico detallado de la situación y así poder dar “batalla” a las drogas frente a una cultura ‘woke’ que, según ha asegurado el portavoz, “lo impregna todo”.
“Nosotros queremos que esto se tome en serio, que el cannabis es una vía de entrada a otras drogas, que el consumo de cannabis potente potencia los efectos de algunas patologías, de algunas enfermedades mentales, que potencian la aparición de esquizofrenia, que destrozan familias”, ha añadido Díaz-Pache, criticando la “trivialización” del consumo de drogas por parte de la izquierda.
El PSOE reclama un clima parlamentario menos crispado y plantea nuevas iniciativas
Por otro lado, Jesús Celada, portavoz del Grupo Socialista, ha trasladado a la presidenta su preocupación por el nivel de crispación que, a su juicio, domina los debates en la Asamblea. En este sentido, Celada ha propuesto la formación de un grupo de diputados que dialoguen fuera del hemiciclo, con el fin de explorar vías que contribuyan a mejorar la calidad del debate parlamentario y a reducir un ambiente “a veces irrespirable”.
“Trato de ser lo más objetivo, el PSOE tiene un comportamiento ejemplar. Somos muy escrupulosos en cuanto al comportamiento y exigimos lo mismo del resto de grupos”, ha señalado el diputado socialista, lamentando que “el insulto, el descalificativo y la agresión verbal” sean cada vez más frecuentes en el debate político.
Sin embargo, al ser preguntado sobre si cree que el secretario general del PSOE-M y ministro de Transición Digital y Función Pública, Óscar López, también debería aplicar esa “bajada de tono”, Celada ha matizado que se trata de una “propuesta personal” que ha surgido tras haber percibido a Ayuso “a la defensiva” durante la reunión.
“Otra cosa es fuera de la Asamblea y allí la señora Ayuso tendrá que saber qué hacer”, ha añadido el portavoz, abogando por establecer límites claros dentro de la Asamblea para así evitar la degradación institucional.
Además de esta demanda, el PSOE ha planteado nuevas propuestas en materia de educación y salud mental. En concreto, ha defendido la creación de una séptima universidad pública en la Comunidad de Madrid y ha propuesto un pacto regional para reforzar la atención a la salud mental. Dos iniciativas que, según los socialistas, deberían ocupar un lugar prioritario en la agenda legislativa de los próximos meses.
Por último, Celada ha aprovechado la ocasión para exigir a Ayuso que atienda a las convocatorias del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, recordando que la presidenta madrileña fue la “única” mandataria autonómica que no participó en los encuentros celebrados en La Moncloa el año pasado.
El Gobierno de Ayuso responde a las acusaciones del PSOE
En respuesta a las demandas y acusaciones de Celada, el consejero de Presidencia, Miguel Ángel García Martín, ha calificado de “curioso” que un “portavoz accidental” del PSOE pida “bajar el tono” en la Asamblea mientras sus ministros se dedican únicamente a “insultar”.
“Nada nos gustaría más que la oposición se centrara en confrontar ideas, en confrontar sobre aquello que preocupa a los madrileños y a los españoles por extensión. Pero, lógicamente, son ellos los que fundamentalmente están siempre tratando de crispar los ánimos en la Asamblea de Madrid”, ha afirmado el consejero, asegurando que, de aplicarse esa bajada del tono, los socialistas “no tendrían nada que decir”, ya que su labor se ha limitado a ataques personales en lugar de ofrecer soluciones políticas para los madrileños.
Asimismo, el consejero se ha referido también a la reunión solicitada por el PSOE entre la presidenta Isabel Díaz Ayuso y el presidente del Gobierno, sugiriendo que los presidentes autonómicos que han pasado por La Moncloa “no han sacado nada en claro”.
“No ha montado esas reuniones bilaterales porque quiera confrontar nada con los presidentes autonómicos. Simplemente lo realizó, como de hecho a las pruebas me remito, para tratar de blanquear los pactos de la vergüenza con los partidos independentistas”, ha sentenciado.