La Guardia Civil ha detenido a un hombre presuntamente involucrado en el asesinato de tres hermanos en Morata de Tajuña, cuyos cuerpos fueron hallados en su vivienda, mostrando claros signos de violencia.
El sospechoso, un ciudadano pakistaní de 42 años, fue arrestado a las 00:30 horas de este lunes en Arganda del Rey. La investigación se centró en él tras su presencia confirmada en la residencia de las víctimas.
Las autoridades le atribuyen un «delito de homicidio doloso por las tres muertes». El descubrimiento de los cuerpos, identificados como Amelia, Pepe y Ángeles, de unos 70 años, se produjo en un operativo de la Guardia Civil de Arganda, después de recibir autorización judicial. Los cuerpos estaban «parcialmente quemados, apilados y con restos de sangre».
Francisco Villalaín, alcalde de Morata de Tajuña, señaló que un hombre que había alquilado una habitación en la casa de los hermanos tuvo una disputa con Amelia, lo que condujo a su detención y a un juicio rápido. Vecinos del lugar indicaron que el inquilino era de origen pakistaní y había agredido a la mujer con un martillo, existiendo además una deuda de aproximadamente 60.000 euros.
La línea de investigación también contempla un posible ajuste de cuentas por una estafa amorosa. Se cree que los hermanos, víctimas de una estafa en línea, habrían acumulado una deuda significativa.
Amelia y Ángeles habían sido engañadas en internet, creyendo estar en relaciones con militares estadounidenses en Afganistán. Uno de los hombres les habría pedido ayuda financiera para acceder a una supuesta herencia millonaria, lo que llevó a las hermanas a gastar cerca de 400.000 euros.
Ante la creciente deuda, las hermanas comenzaron a solicitar dinero a conocidos, incluido el párroco local. Sin embargo, al ser advertidas del engaño y rechazadas sus peticiones, se aislaron hasta desaparecer en diciembre.
La ausencia de los hermanos fue notable cuando las persianas de su casa permanecieron cerradas y no respondieron llamadas telefónicas. La Guardia Civil, alertada por el mal olor denunciado por vecinos, descubrió los cuerpos en descomposición.
Los cadáveres fueron enviados al Instituto de Medicina Legal para autopsias. Durante la inspección de la vivienda, la Policía Científica encontró una pistola de fogueo, cuyo origen está siendo investigado.