El presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha respaldado la propuesta de un alto el fuego en Ucrania, aunque ha señalado que existen «inconvenientes» y ha insistido en la necesidad de conocer más detalles sobre su implementación para garantizar «una paz duradera». Así lo expresó durante una rueda de prensa en Moscú, tras reunirse con el presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, un día después de que Kiev aceptara la oferta de un cese de hostilidades de 30 días impulsada por Estados Unidos.
«Estamos de acuerdo con la propuesta del fin de las hostilidades, pero partimos del hecho de que el cese debe ser tal que conduzca a una paz duradera y elimine las causas originales de esta crisis», afirmó Putin. No obstante, el mandatario ruso expresó sus reservas sobre ciertos aspectos de la tregua, en particular la situación de los soldados ucranianos en la región rusa de Kursk, ocupada por tropas de Kiev desde agosto del año pasado. «La única salida para ellos es morir o ser capturados», subrayó. Además, remarcó que los «próximos pasos» en el proceso de negociación dependerán del avance ruso en esa zona, la cual, aseguró, está «bajo control» de Moscú y donde las tropas ucranianas se encuentran «completamente aisladas».
Putin plantea «cuestiones importantes»
Durante su intervención, Putin planteó varias «cuestiones importantes» que considera necesarias aclarar antes de dar luz verde a la propuesta. «¿Para qué servirá esa tregua de 30 días? ¿Para que se refuercen las fuerzas ucranianas? ¿Cómo se verificará que eso no ocurre? […] ¿Quién dará las órdenes para parar los combates? ¿Quién decidirá dónde, cuándo y quién ha roto ese alto el fuego? ¿A quién se le va a culpar?», preguntó el líder ruso.
En su comparecencia, el jefe del Kremlin también dirigió palabras de agradecimiento al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, por su interés en buscar una solución al conflicto en Ucrania, iniciado por Rusia el 24 de febrero de 2022. Putin calificó la propuesta de tregua como «una idea correcta» y aseguró que su país está dispuesto a apoyarla, aunque insistió en la necesidad de resolver las incógnitas pendientes y debatirlas con Washington, en particular con Trump. «Tal vez debería llamar al presidente Trump y tener una discusión con él, pero apoyamos la idea de poner fin a este conflicto por medios pacíficos», expresó.
La iniciativa de alto el fuego fue impulsada por Trump tras su llegada a la Casa Blanca en febrero, en cumplimiento de una de sus promesas de campaña. Con la aceptación de Kiev, la decisión quedaba en manos de Moscú, que ahora analiza los términos del acuerdo.
Tras la intervención de Putin, el presidente estadounidense manifestó su esperanza de que su homólogo ruso «haga lo correcto» y se mostró dispuesto a dialogar nuevamente con él. «Ha hecho una declaración muy prometedora, pero no estaba completa», señaló Trump, quien reiteró su deseo de ver un compromiso por parte de Rusia para cesar las hostilidades.
Zelenski desconfía de las intenciones de Putin
Por su parte, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, se mostró escéptico ante la postura del Kremlin y sostuvo que Putin estaría preparando un rechazo a la propuesta de alto el fuego, pero sin atreverse a decírselo directamente a Trump. Además, acusó al mandatario ruso de intentar «alargar las cosas».
«Todos hemos escuchado las muy previsibles y manipuladoras palabras de Putin en respuesta a la idea» de esta tregua, afirmó Zelenski en un comunicado, en el que también pidió al resto de países aumentar la presión sobre Moscú para que acceda a un acuerdo real y verificable de cese de hostilidades.
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