«Nos faltan medios, humanos y materiales, y desde el Ministerio del Interior y la Dirección General de la Guardia Civil hacen oídos sordos, pero los que estamos sobre el terreno, en la lucha contra el narcotráfico, somos nosotros, y nos jugamos la vida prácticamente a diario».
Sin tapujos y con contundencia. Así se manifiestan, en declaraciones a ESTRELLA DIGITAL, guardias civiles de AUGC (la Asociación Unificada de Guardias Civiles) destinados en la provincia de Cádiz al preguntarles sobre la lucha contra el narcotráfico que llevan a cabo en el litoral andaluz.
Y que digan que «se juegan la vida» ya se pudo comprobar el pasado 9 de febrero, cuando dos guardias civiles fueron asesinados por los narcos, cuando la embarcación en la que desempeñaban sus funciones fue fuertemente embestida por una de sus ‘narcolanchas’.
Hoy precisamente se ha detenido al presunto autor del asesinato. Él era quien, supuestamente, pilotaba la ‘narcolancha’. Y con respecto a la detención, guardias civiles de Cádiz califican el hecho como «muy importante y que demuestra el ahínco y el personal humano que tiene la Institución, porque no era fácil investigar esos hechos».
«No ha habido incremento de medios ni humanos ni materiales»
Cuando denuncian que el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, «vende humo» se refieren a que todas las medidas que dice estar implementando en la zona, (enmarcadas en el Plan de Seguridad del Campo de Gibraltar), para dotar de más medios a los guardias civiles allí destinados… «no son ciertas».
«No ha habido incremento de medios ni humanos ni materiales», denuncian. Y, a modo de ejemplo, citan casos concretos: los agentes destinados en Seguridad Ciudadana también intervienen en la lucha contra el narcotráfico, además de en todos los casos propios de esta especialidad (violencia de género, actos delictivos, etc.).
Y aseguran que para una demarcación de 100 kilómetros cuadrados sólo tienen una patrulla. También se refieren a la lucha contra los narcos en el litoral, y se quejan de que, en ese caso, ocurre lo mismo: «Sólo hay una patrulla para cubrir toda la zona que se encuentra entre Sanlúcar de Barrameda y La Línea de la Concepción (alrededor de 200 kilómetros de costa)».
«No le estamos ganando la batalla a los narcos»
Y lo peor de todo «es que los narcos lo saben y se mueven a sus anchas». Por eso denuncian, con un alto grado de impotencia, que «no se les está ganando la batalla» como quieren «vender desde Interior y desde la Dirección General de la Guardia Civil».
A ellos les supone «un estrés añadido», que «asumen -dicen- porque es nuestro trabajo», pero no consideran justo que se produzcan hechos como el ocurrido en Barbate, «por esa falta de medios -puntualizan- y por tomar decisiones precipitadas, sin que, esa decisión en concreto -la de salir a combatir a los narcos con una embarcación que no disponía de los medios necesarios- la adoptasen los mandos que estaban sobre el terreno».
«El narcotráfico es la primera industria de la provincia de Cádiz»
Se quejan, y es una reivindicación que no es nueva, de que «no hay visos de que nadie quiera» dotarlos «de los medios necesarios». Porque en la lucha contra el narcotráfico hacen falta, y así lo llevan pidiendo desde hace tiempo, más efectivos y más vehículos, embarcaciones… y un largo etcétera de medios que deberían tener para hacer frente a «la primera industria de la provincia de Cádiz: el narcotráfico».
También demandan que esa zona en concreto (Cádiz), que es la más perjudicada en la lucha contra el narcotráfico, sea declarada «zona de especial singularidad». Eso significaría que los guardias civiles allí destinados podrían contar con esos medios y también con mayores retribuciones.
Es cierto que Interior y la Dirección General de la Guardia Civil envían refuerzos a los agentes destinados en Cádiz. Es el caso de los GAR (Grupos de Acción Rápida, que provienen de la lucha contra el terrorismo de ETA y son especialistas en este tipo de operaciones), «pero son refuerzos entre comillas -subrayan-, porque no son suficientes».
También patrulla por el litoral el Servicio Marítimo de la Guardia Civil, o el Servicio de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria, pero insisten una y otra vez en que «no es suficiente», aunque quieren puntualizar que «todos estos refuerzos hacen una labor encomiable a pesar de la carencia de más efectivos y más material».
«Si queremos combatir el narcotráfico debemos tener los mismos medios que ellos»
«Los narcos, desafortunadamente, van por delante de nosotros», se lamentan. «Porque tienen financiación y las mejores tecnologías», explican. De ahí que, para hacerles frente, los guardias civiles exijan «estar a la altura» del enemigo al que se enfrentan.
A modo de conclusión, comentan a este medio que, además, desde hace un tiempo también tienen que luchar contra lo que ellos denominan «petaqueo», el término que emplean para referirse a las embarcaciones y redes organizadas que suministran combustible a las ‘narcolanchas’. «Muchos requerimientos para poco personal, y así nunca ganaremos la batalla», concluyen.