En un contexto en el que la ruta migratoria de África Occidental (la que pasa por Canarias) está experimentando un «flujo sin precedentes» (con incrementos que han llegado a sobrepasar el 300 %, según datos de Frontex), el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha pedido, precisamente a Frontex, que contribuya a la prevención de esta crisis migratoria en aguas africanas.
Y que contribuya «como medida para salvar vidas», insistiendo en la necesidad de un despliegue de la agencia en Mauritania, Senegal y Gambia, «donde España -ha recordado- ya trabaja desde hace años». De hecho, en la actualidad hay miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado desplegados en países como Mali, de donde proceden un gran número de personas que entran en España de manera irregular.
Lo ha hecho este jueves 10 de octubre durante la celebración en Luxemburgo del Consejo de Ministros de Interior, el mismo foro en el que, ya mes de junio se rebeló contra las exigencias de la UE y pidió «flexibilidad y financiación urgente» para aplicar el Pacto de Migración y Asilo.
Marlaska ha señalado que la clave de la eficacia de Frontex (la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas) reside en la adecuación de su marco legislativo a las necesidades de los países. «Es especialmente importante mejorar su capacidad para actuar en el exterior, tanto en materia de retorno como de gestión de fronteras», ha subrayado.
Marlaska solicita a la UE más atención a la ruta migratoria atlántica
En esa línea, el titular de Interior ha solicitado a la Unión Europea más atención a la ruta migratoria atlántica. «La cooperación que la UE ha sabido desarrollar con los países candidatos o con los del Mediterráneo -ha añadido- debe extenderse también a nuestros socios africanos en el Atlántico, con un enfoque integral», que incluye atajar la inmigración irregular desde los países de origen.
Durante su intervención en el debate sobre la política de retorno de la UE, el ministro ha destacado la importancia de la prevención de la inmigración irregular y de la cooperación «en asociaciones mutuamente beneficiosas con terceros países» para lograr una mayor eficacia en los retornos, «siempre con un compromiso ineludible con los derechos fundamentales, que son un pilar de la Unión Europea».
Según el último informe quinquenal del Ministerio del Interior sobre inmigración irregular, correspondiente al periodo entre el 1 de enero y el 30 de septiembre, sólo por Canarias han entrado en España de manera irregular, y por vía marítima, 30.808 personas, lo que supone un incremento del 105,7 % con respecto al mismo periodo del año anterior.