Este domingo marca una fecha trágica en la historia de la aviación española: el 15 aniversario del accidente del vuelo JK5022 de Spanair. Aquel 20 de agosto de 2008, una aeronave McDonnell Douglas MD82 con 172 personas a bordo se estrelló poco después de despegar del Aeropuerto de Madrid-Barajas, camino a Las Palmas de Gran Canaria. De los pasajeros y la tripulación a bordo, 154 perdieron la vida y solo 18 lograron sobrevivir.
Este desastre, que tuvo lugar en una fecha en la que muchos viajeros iniciaron o finalizaron sus vacaciones, sigue siendo uno de los más letales en suelo español. Según informes, la tragedia se debió a una serie de fallos técnicos y humanos, donde se identificó que el avión intentó despegar sin los flaps y slats en posición, y la alarma que debería haber advertido a la tripulación no se activó. Días antes del despegue, el piloto había solicitado una revisión debido a un problema detectado en el indicador de temperatura.
En 2009, la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil (CIAIAC) publicó un informe detallando que el avión despegó con los flaps replegados y que el sistema de alerta (TOWS) no funcionaba adecuadamente. Esta tragedia desencadenó imputaciones legales, con técnicos y directivos de Spanair acusados de homicidio imprudente.
Pilar Vera, presidenta de la Asociación de Afectados del Vuelo JK5022 (AVJK5022), resalta la resistencia de la asociación durante estos años, enfrentando desafíos de entidades poderosas como aseguradoras, fabricantes de aviones y la administración española. A pesar de estas adversidades, la asociación ha logrado avances significativos, como cambios en el Estatuto de la Víctima en 2016.
Sin embargo, Vera insiste en que aún quedan desafíos pendientes, como reformas en la estructura de investigación de accidentes y esfuerzos para garantizar justicia adecuada para las víctimas y sus familias.
A medida que España recuerda el vuelo JK5022, las lecciones aprendidas y los esfuerzos para mejorar la seguridad aérea permanecerán en el centro de atención, asegurando que este trágico suceso no haya sido en vano.
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