¿Sabías que existe el estrés térmico?
Verano, las temperaturas disparadas, ni un poco de brisa… los expertos de Despertares nos alertan contra el estrés térmico. Ocurre cuando el cuerpo se sobrecalienta, lo que puede afectar no solo nuestra salud física, sino también nuestra salud mental. ¿Sientes cansancio extremo, falta de concentración, irritabilidad y/ o ansiedad después de una exposición al calor?
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Cómo combatir el estrés térmico
- Agua: Bebe mucha agua, refrescos y bebidas hipocalóricas o sin azúcar durante todo el día para mantener tu cuerpo hidratado. La deshidratación puede aumentar la fatiga y la irritabilidad, así que lleva siempre contigo una botella de agua.
- Evita el Sol: Tomar el sol tiene sus beneficios pero sin abusar, trata de permanecer en lugares frescos y con sombra durante las horas más calurosas del día. Usa ropa ligera y de colores claros para mantenerte fresco.
- Frescor en Casa: Utiliza ventiladores o aire acondicionado para mantener tu intimidad a una temperatura razonable. Cierra las persianas o cortinas durante el día para bloquear el calor del sol.
- Relax: Practica técnicas de relajación como la respiración profunda, el yoga o la meditación para reducir la ansiedad y el estrés. Estas prácticas, al igual que el deporte, pueden ayudarte a mantener la calma y el equilibrio emocional.
- Horarios Frescos: tus actividades al aire libre deben ser temprano en la mañana o al atardecer, cuando las temperaturas son más bajas. Esto te permitirá disfrutar del verano sin el impacto negativo del calor extremo en tu cabeza.
- Escucha a Tu Cuerpo: el cuerpo habla, préstale toda tu atención. Si te sientes cansado o abrumado por el calor, tómate un descanso y refréscate. No te fuerces a seguir adelante si no te sientes bien.
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