Agresión a porteros en Chamberí: dos detenidos por gas pimienta

El incidente ocurrió el pasado sábado sobre las diez y cuarto de la noche en la calle Covarrubias número 42, cuando varios testigos alertaron a los empleados de seguridad del establecimiento de que dos personas estaban orinando en una de las escaleras del edificio. Al ser requeridos para abandonar el recinto, la situación se descontroló por completo.
Los dos hombres, lejos de acatar las indicaciones, reaccionaron con extrema violencia. Sacaron defensas extensibles —objetos similares a porras metálicas— y comenzaron a agredir a los porteros del local. Uno de ellos, además, roció gas pimienta, lo que generó un caos absoluto tanto dentro como fuera de la discoteca.
El aerosol afectó rápidamente a quienes esperaban para entrar, y también a un bar cercano. Pero el problema no terminó ahí. El gas se filtró a través del sistema de ventilación hasta la cercana estación fantasma del Metro de Chamberí, donde un equipo de rodaje trabajaba en una producción de HBO.
Cien personas desalojadas en pleno rodaje
En el momento del suceso, un centenar de personas —entre técnicos, actores y personal de producción— se encontraba en plena grabación. Al notar los efectos del gas, se activó el protocolo de emergencia y se procedió a evacuar de inmediato todo el recinto subterráneo, generando gran desconcierto.
Sanitarios del Samur-Protección Civil se desplazaron hasta el lugar y atendieron a cuatro personas afectadas por irritaciones oculares e intoxicación leve. Afortunadamente, todas fueron dadas de alta allí mismo, sin necesidad de traslado hospitalario.
Arrestados por desórdenes públicos
La Policía Nacional, en colaboración con agentes de la comisaría de Chamberí, detuvo a los dos agresores poco después del ataque. Ambos están acusados de un presunto delito de desórdenes públicos. Uno de ellos, habría estado vinculado con un grupo violento de ideología redskin.
Desde la Policía se ha querido destacar la actuación firme pero proporcionada de los porteros, que lograron contener la situación pese a la agresión recibida y a la propagación del gas, evitando consecuencias más graves.
Un sábado noche que acabó en caos
La escena vivida en Chamberí recuerda la importancia de contar con protocolos de actuación rápidos y efectivos en locales de ocio nocturno. Lo que comenzó como una simple llamada de atención por comportamiento incívico, acabó desencadenando una intervención policial, varios atendidos por intoxicación y dos espacios evacuados por motivos de seguridad.
Este suceso incide sobre la seguridad en las discotecas y la necesidad de mantener la vigilancia ante conductas violentas que pueden tener consecuencias mucho más graves de lo que parece en un primer momento.