El pasado 24 de febrero Laura Boyer, hija de Miguel Boyer, fallecía a los 57 años después de una larga enfermedad. Hasta el momento, poco se sabía de la hija menos mediática de Boyer, que siempre se mantuvo alejada de los focos.
Hasta ahora: que la revista Semana ha publicado en exclusiva una entrevista póstuma a la hija de Miguel Boyer (fruto de su relación con Elena Arnedo, su primera esposa), en la que dedica unas durísimas palabras a la que fue su madrastra durante años, Isabel Preysler.
Laura Boyer: «Isabel alejó a mi padre de nosotros. Llegué a odiarla»
La ruptura entre Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa levantó ríos de reproches por ambas partes, algo a lo que no estábamos acostumbrados con la socialité, que siempre había sido muy discreta con los motivos que habían desencadenado sus rupturas.
Ahora, Preysler debe combatir un nuevo frente: una entrevista póstuma que la revista Semana hizo a Laura Boyer, en la que dedica unas muy duras palabras a la que fue su madrastra. Al parecer, dos semanas antes de morir, la hija de Miguel Boyer envío a la revista una especie de carta abierta para su publicación. Finalmente, según afirman fuentes de la propia revista, ambas partes acordaron realizar una entrevista en la que Laura Boyer pudiera contar antes de fallecer cómo vivió su situación familiar.
«Siempre he querido hablar, lo que pasa que no estaba en disposición porque mis hijos eran muy pequeños o tenía problemas con mi ex marido, lo de la herencia de mi madre. Había muchos frentes abiertos y no quería abrir más. Ahora me veo más liberada. Además, estoy mal de salud y me apetece hacerlo», explica Laura en las páginas de la revista.
En la entrevista, Laura Boyer dedica palabras muy duras a Isabel Preysler: «He tenido relación con Isabel, pero con muchísima hipocresía«, explica.
Además, Laura Boyer también explica que la relación de su padre con Isabel Preysler la hizo sufrir «mucho». «Vi a mi madre muy mal. Para mí, Isabel Preysler es una persona hiperposesiva, que alejó a mi padre», afirma Laura. Además, también asegura que la socialité es «una mujer fría y muy calculadora» y confiesa que llegó a odiarla: «A raíz de que mi padre se muriera. Antes no. Mientras él vivió solo tenía una enemiga».
También afirma que, según su opinión, Isabel Preysler no cuidó a su padre (Miguel Boyer enfermó antes de morir), sino que «le puso un montón de gente para cuidarle, pero ella no le cuidó».
La herencia de Miguel Boyer y la poca relación con su hermana Ana
Además de cargar contra la figura de Isabel Preysler, Laura Boyer también habla sobre otro escabroso tema: cómo se gestionó la herencia de Miguel Boyer a la que, según afirma en la entrevista, ella llegó a renunciar por las desavenencias con Isabel Preysler.
«Con la herencia de mi padre hubo cero problemas. Renuncié a ella. Solo me pedían dinero. Isabel me daba unas guías de Madrid y un busto que pesaba más de lo que valía, así que entre el gasto de llevármelo y los gastos médicos que me reclamaban, decidí ir a un notario y firmar la renuncia».
En la entrevista, Laura también aborda otro de los secretos a voces sobre su familia: la relación prácticamente inexistente que tenía con su hermana Ana, nacida de la relación de su padre con Isabel Preysler.
«Tengo el teléfono de Ana, pero no lo uso. La última vez que hablamos fue por la herencia de mi padre. Hablamos poco pero se puso de parte de su madre. Cuando era pequeña yo le regalaba juguetes, pero les hacía poco caso. Su madre le comía el coco. Ana nunca ha sido tan simpática como sus hermanos. El resto de los hijos de Isabel Preysler se han portado conmigo maravillosamente. Con Tamara tuve una buena relación, ya que la he visto desde pequeña», explica Laura.
Sin duda, estas duras palabras habrán sido un difícil golpe para Isabel Preysler, quien ahora está viviendo un momento dulce y feliz, inmersa en la preparación de la boda de su hija Tamara con Íñigo Onieva.