La Policía Nacional ha detenido a seis personas más en el marco de la investigación que ya llevó al arresto de Óscar Sánchez, jefe de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de Madrid, quien ocultaba 20 millones de euros en las paredes de su vivienda en Alcalá de Henares. Esta cantidad, según fuentes policiales y jurídicas, provendría de su presunta vinculación con el narcotráfico.
Los últimos arrestos, realizados en Madrid, Barcelona y Murcia, se suman a los 15 detenidos iniciales, entre ellos la mujer del inspector, también agente de la Policía Nacional. Tres de los nuevos detenidos han ingresado en prisión tras pasar a disposición del juez Francisco de Jorge, titular del Juzgado Central número 1 de la Audiencia Nacional.
Detenido el jefe de la Sección Antiblanqueo de la Policía Nacional en Madrid
Dinero oculto y bienes de lujo
En los registros, además de los 20 millones de euros encontrados en su domicilio, se incautaron cerca de un millón de euros en el despacho del inspector jefe en la Jefatura Superior de Policía de Madrid. Asimismo, la operación ha permitido la confiscación de diversos coches de lujo, como un Lamborghini, propiedad de otros implicados en la trama.
Las autoridades continúan investigando para localizar más fondos ocultos, tanto en formato físico como en criptomonedas, un método que, según los agentes, podría haber sido utilizado para camuflar las ganancias ilícitas de esta organización criminal.
Conexión con el mayor alijo de cocaína en España
La trama guarda relación con la incautación de 13 toneladas de cocaína en el Puerto de Algeciras, en un cargamento de bananas procedente de Ecuador, un hallazgo histórico para la Policía Nacional y la Agencia Tributaria. Este decomiso, liderado por agentes de la UDYCO y Vigilancia Aduanera, fue presentado en rueda de prensa como el mayor alijo de cocaína interceptado en España.
En aquel momento, las autoridades ya adelantaron que la investigación seguía abierta y que había personas en busca y captura. Las recientes detenciones refuerzan las sospechas de una red criminal compleja, que no solo operaba en el ámbito del narcotráfico, sino también en el de blanqueo de capitales y cohecho.
Bajo sospecha durante más de un año
Fuentes de la investigación han confirmado que el inspector jefe, al frente de la unidad de delitos económicos, llevaba más de un año bajo sospecha por parte de Asuntos Internos. Las pesquisas, iniciadas en colaboración con la Audiencia Nacional, apuntan a que la red utilizaba su posición para facilitar operaciones ilícitas y encubrir actividades criminales, lo que supone un golpe significativo a la imagen del cuerpo policial.
Una operación en curso
La investigación, aún bajo secreto de sumario, continúa abierta. Según las autoridades, las diligencias actuales buscan desentrañar el alcance completo de la organización criminal, que podría incluir ramificaciones internacionales y el uso de redes sofisticadas de blanqueo.
Este escándalo ha sacudido a la Policía Nacional, planteando interrogantes sobre los mecanismos internos de control y el impacto de esta trama en la confianza ciudadana hacia las instituciones encargadas de velar por la seguridad y la legalidad.