Una extrabajadora de TikTok denuncia secuelas psíquicas tras años moderando vídeos violentos

Revisaba entre 800 y 1.200 vídeos al día con solo cinco minutos de descanso por hora, según recoge la querella presentada en Barcelona
Condiciones "inhumanas e inaguantables". Así define una extrabajadora de una empresa subcontratada por TikTok los cuatro años que pasó moderando contenidos extremadamente sensibles: vídeos de asesinatos, decapitaciones, violaciones, suicidios y otras escenas violentas que, asegura, han dejado secuelas profundas en su salud mental.
La mujer, de nacionalidad alemana, ha presentado una querella penal contra cinco exdirectivos de la empresa Majorel SP Solutions, compañía con sede en Barcelona que prestaba servicios de moderación de contenido para la red social china. La denuncia, registrada esta mañana en la Ciutat de la Justícia, va firmada por el abogado Francesc Feliu.Acusaciones por daños psíquicos y vulneración de derechos
En el escrito, al que ha tenido acceso EFE, se acusa a los directivos de delito continuado contra los derechos de los trabajadores, lesiones graves por imprudencia grave y atentado contra la integridad moral. La querellante asegura que fue sometida a un entorno laboral nocivo, sin preparación ni apoyo psicológico, pese al alto impacto emocional de los vídeos que tenía que analizar.
La afectada comenzó su trabajo en 2019, primero con contenido en alemán y más tarde en español. Nadie le advirtió, según el relato, de que su jornada estaría centrada en la visualización de vídeos con escenas que incluían:
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Asesinatos
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Violaciones
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Suicidios
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Torturas
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Pornografía infantil
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Terrorismo
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Desmembramientos y decapitaciones
Algunos vídeos duraban hasta cuatro minutos completos y debían visionarse en su totalidad, sin censura previa.
Una jornada tóxica: más de mil vídeos al día y apenas descanso
La dinámica de trabajo consistía en revisar entre 800 y 1.200 vídeos cada día, con un margen de descanso de solo cinco minutos por hora. La querella sostiene que la empresa conocía de antemano los riesgos que implicaba esta exposición constante a material traumático, pero no tomó medidas preventivas ni ofreció soporte psicológico adecuado.
Entre los efectos sufridos por la mujer, destacan episodios de ansiedad, taquicardias, vómitos, pesadillas recurrentes y un estado de depresión profunda que le llevó a una baja médica de seis meses. A su regreso, fue despedida.
Falta de apoyo psicológico y despido tras la baja
Según la denuncia, entre 2019 y 2021 no existía ningún tipo de atención psicológica. Más tarde, cuando se introdujo algún servicio de apoyo, este era ofrecido por personas sin cualificación específica y sin que los trabajadores fueran informados de su disponibilidad.
Tras la baja laboral, al reincorporarse a su puesto, la empresa prescindió de sus servicios, lo que ha llevado a la querellante a incluir también en la denuncia a otras entidades implicadas: TikTok Technology Limited (con sede en Irlanda), TikTok Information Technologies Spain (filial española con sede en Madrid) y la propia Majorel SP Solutions, como responsables de las condiciones laborales impuestas.
Una demanda que podría marcar un precedente
El caso podría abrir la puerta a otras reclamaciones similares, en un sector donde la exposición a contenidos extremos sigue siendo una realidad silenciada. La denuncia pone sobre la mesa un debate pendiente sobre los límites de la moderación de contenido digital y la responsabilidad de las grandes plataformas sobre la salud mental de quienes trabajan para ellas.
La causa ya está en manos del juzgado, y se espera que en las próximas semanas se inicien las diligencias previas para investigar los hechos. Mientras tanto, la mujer reclama no solo justicia, sino también un reconocimiento público al impacto que esta actividad ha tenido en su vida.