Ni Mercedes ni Ferrari han querido proporcionar su motor a Red Bull ante el temor de que la escudería austriaca se sume a la pugna por el título en el próximo Mundial. Los monoplazas de Daniel Ricciardo y Dani Kvyat estarán en parrilla gracias al acuerdo con Renault, que como ha sucedido en los últimos años, les suministrará la unidad de potencia. Un acuerdo satisfactorio, según el comunicado oficial emitido: «Estamos encantados de ver que Renault ha confirmado su compromiso con la Fórmula 1 y me gustaría agradecerles su contribución al equipo desde 2007».
El nombre de ese motor será Tag Heuer, según ha decidido el equipo de Christian Horner. La famosa marca de relojes también se ha convertido en uno de los patrocinadores principales de Red Bull tras emigrar de McLaren y asumirá parte del nombre del nuevo monoplaza: Red Bull Racing-TAG Heuer RB12
La escudería que ha tenido más fortuna es Toro Rosso. La filial de Red Bull correrá con un motor Ferrari como ya hizo entre 2007 y 2013. La unidad de potencia será la que ha utilizado la escudería italiana, entre otras, en este 2015. Las grandes potencias no ven a Toro Rosso con opciones de pelear por el título, al contrario de lo que sucede con el equipo principal.
La filial de Red Bull ha expresado su optimismo de cara al próximo curso y ha anunciado la continuidad de sus pilotos en 2016: «Teniendo en cuenta esto y los últimos logros con nuestros amigos de Maranello, sin duda podemos esperar una mejora de nuestro rendimiento el próximo año. También podemos contar con Carlos Sainz y Max Verstappen».