Las fuerzas de la ONU en el Líbano (FINUL) han denunciado un nuevo ataque del ejército israelí contra una de sus instalaciones en el sur del país, cerca de la localidad de Kafer Kela. El ataque, ocurrido este miércoles, dejó dos cámaras destruidas y daños en la torre de vigilancia, según un comunicado oficial de la misión.
El comunicado de la FINUL detalla que «un tanque Merkava de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) se disparó directamente contra la torre de vigilancia en Kafer Kela, provocando la destrucción de dos cámaras y daños en la estructura». La misión subrayó que «este es otro caso de disparos directos y aparentemente intencionados» contra posiciones de la FINUL.
La misión también recordó a Israel y a todas las partes involucradas en la región su responsabilidad de garantizar la seguridad de los bienes y el personal de la ONU, así como de respetar la inviolabilidad de las instalaciones de Naciones Unidas «en todo momento».
Por su parte, el Ejército israelí ha afirmado que está investigando el incidente sin confirmar ni negar el ataque. En un comunicado, señaló que sus operaciones en el sur del Líbano están dirigidas contra Hizbulá y que «las fuerzas de la FINUL no son un objetivo». Aunque se comprometieron a examinar cualquier «incidente irregular» a fondo, hasta el momento no ha habido consecuencias para las fuerzas israelíes por otros ataques recientes que han afectado a la misión de paz, dejando al menos cinco heridos.
En las últimas semanas, la FINUL ha registrado un incremento en los incidentes, con cinco de sus ‘cascos azules’ heridos por ataques israelíes, incluyendo disparos contra su cuartel en Naqoura el pasado sábado. La misión también anunció que dos tanques israelíes ingresaron en una de sus posiciones la semana pasada, permaneciendo allí durante 45 minutos antes de retirarse tras las protestas del personal de la ONU.
Resolución 1701
Desde hace 46 años, la misión de la FINUL en Líbano opera bajo la resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU, que puso fin a la guerra de 2006 entre Líbano e Israel. Sin embargo, Israel ha pedido repetidamente la retirada de los ‘cascos azules’ argumentando que se han convertido en «escudos humanos» para Hizbulá, según declaraciones del primer ministro Benjamín Netanyahu.
Pese a estas presiones, el jefe de operaciones de paz de la ONU, Jean-Pierre Lacroix, afirmó el martes que la misión mantendrá su presencia en el Líbano, recordando que todas las partes deben garantizar la seguridad del personal de la ONU en cumplimiento del derecho. internacional.
Entretanto, el Gobierno libanés ha denunciado un incremento en los ataques israelíes en el sur del país, con un total de 138 bombardeos en las últimas 24 horas, elevando a más de 10.000 los ataques registrados desde octubre del año pasado. El conflicto ha provocado el desplazamiento interno de cerca de 190.000 personas, que han buscado refugio en los más de 1.000 centros habilitados en todo el país, principalmente en las regiones de Monte Líbano y Beirut.