Xavier Trías ganó las elecciones municipales en Barcelona, pero abandona la política. “Si no salgo alcalde, que les den a todos”. Hace unos días cumplió 20 años como edil de la segunda urbe más poblada de España. Es concejal de JuntsxCat desde este sábado en el Ayuntamiento de la Ciudad Condal. En teoría, tiene derecho a seguir en la oposición un mandato más tras imponerse la candidatura del socialista Jaume Collboni en el debate de investidura. Trías había negociado su acceso a la alcaldía con el PSC y también con ERC, pero los votos de Ada Colau y los del PP provocaron un giro dramático de los acontecimientos. Trías no aguantará cuatro años más en la oposición habiendo sido el más votado y prepara su salida de la política profesional remunerada. Lleva casi cuatro décadas cobrando sueldos públicos como cargo electo o de libre designación.
Estaba cobrando 92.600 euros brutos anuales y, sin tener en cuenta posibles cambios en el régimen retributivo de la nueva corporación y los incrementos por el IPC al inicio de cada ejercicio, ha confirmado que renuncia al acta de concejal. Tenía garantizado ganar más en la oposición como portavoz de su grupo municipal que lo que ingresa Pedro Sánchez como presidente del Gobierno este año (90.010 euros), si conserva La Moncloa hasta final el 31 de diciembre. Con un mandato completo de cuatro años, Trias ‘renuncia’ a, como mínimo, 370.400 euros.
Eso sí, si hubiera conseguido la vara de mando, sus ingresos habrían aumentado menos de un siete por ciento, hasta los 100.000 euros anuales, a la espera de que en el próximo pleno extraordinario se fijen los sueldos públicos y dedicaciones de todos los miembros de la corporación, lejos de la cantidad que cobró hace 10 años.
Durante su etapa de alcalde, el Ayuntamiento de Barcelona tenía hasta 360 personas entre cargos electos y personal eventual. Su salario, entonces, superaba los 109.000 euros, sin contar las dietas de otras entidades que sumaban más de 30.000 euros, aunque el consistorio tuvo que rebajarlo a 100.000 para ajustarse a los límites impuestos por Hacienda.
En febrero de 2013, con Trias de alcalde, 15 de los 41 concejales de Barcelona cobraban más de 100.000 euros brutos anuales. Los ingresos públicos de Trias eran, en ese año, de 140.708 euros porque a su sueldo había que sumar las dietas de dos organismos públicos, según publicó El País. Si comparamos, en ese año Rajoy cobraba 78.185 euros como presidente del Gobierno. Trias calificó de “escándalo” que Rajoy estuviera tan mal retribuido. Afirmó que “los sueldos de los políticos son insuficientes”, aunque reconoció que era un debate que actualmente no se podía abrir porque no estaría respaldado por la sociedad, según palabras que recogió la agencia EFE.
Han pasado 10 años de esas declaraciones de Trias. El viernes pasado tenía pensado ser alcalde y ‘heredar’ el sueldo de Colau de 100.000 euros al año. No ha querido conformarse con el de 92.600 como concejal portavoz de grupo en la oposición.
Hace cinco años, algunos medios de comunicación vincularon su nombre con una sociedad offshore con sede en las Islas Vírgenes, dentro de los llamados ‘Papeles del Paraíso’. La mercantil operó hasta 2013, cuando Trias ya era alcalde de Barcelona. Su abogado de entonces admitió la existencia de un trust familiar a través del banco privado RBS Coutts de Suiza. “Esto lo montó su padre y lo heredó su madre, y la verdad es que a los hijos no les llegó nada. El problema es que no tengo pruebas para demostrarlo, porque el despacho que lo llevaba no me facilita la información”. Trias no sabía nada, según publicó El Mundo.
Área de Sanidad
Trias es uno de los políticos más veteranos de Cataluña ya que lleva 39 años de carrera pública. Primero en Convergència Democrática de Catalunya, luego con el PDeCAT y, desde el año pasado, con Junts. Médico de formación, se licenció en Medicina y Cirugía por la Universidad de Barcelona para especializarse en Pediatría. Ha sido jefe del Servicio de Asistencia Hospitalaria del Departamento de Sanidad y Seguridad Social de la Generalitat de Catalunya entre 1981 y 1983.
Luego entró en política, pero vinculado a cargos del área de Sanidad. Fue director general de Ordenación y Planificación Sanitaria entre 1983 y 1984; director general del Instituto Catalán de la Salud los siguientes cuatro años. Entre 1988 y 1996 fue consejero de Sanidad de los distintos gobiernos de Jordi Pujol. En la siguiente legislatura (1996-2000), Pujol le eligió consejero de Presidencia.
En 2000 dejó la política autonómica para trasladarse temporalmente al Congreso de los Diputados, donde fue presidente del Grupo Parlamentario Catalán entre 2000 y 2003. En 2003 se incorporó al Ayuntamiento de Barcelona como concejal. Fue alcalde entre 2011 y 2015. Y hasta el sábado pasado pensaba que lo iba a ser hasta 2027. Tendría 80 años.