El rey emérito reclama 50.000 euros a Miguel Ángel Revilla por declaraciones "injuriosas"

Estas declaraciones fueron realizadas en medios de comunicación entre mayo de 2022 y enero de 2025. En caso de no alcanzar un acuerdo, el monarca podría interponer una demanda por daños morales.
La iniciativa legal ha sido confirmada por Guadalupe Sánchez, abogada que también representa a Alberto González Amador, pareja de Isabel Díaz Ayuso, en sus acciones civiles. Según explica Sánchez en un comunicado, Juan Carlos I le ha encargado "su representación y defensa en el ejercicio de las acciones civiles de protección del derecho al honor" contra Revilla, debido a una serie de declaraciones que, según la defensa del monarca, contienen calumnias graves y expresiones "oprobiosas".
Acto de conciliación previo a la demanda
Antes de acudir a los tribunales con una demanda formal, la defensa del rey emérito ha solicitado la celebración de un acto de conciliación con el objetivo de evitar el litigio. En este encuentro judicial, se solicitaría a Revilla una rectificación pública de sus declaraciones en los mismos medios donde fueron difundidas, además de la mencionada indemnización de 50.000 euros, que, según el comunicado de la abogada, sería donada "íntegramente" a Cáritas España.
Desde la Casa Real, han indicado que esta acción legal es una "iniciativa personal" del rey emérito a través de sus abogados privados, sin que la institución haya tenido participación en el proceso.
Por su parte, desde el Partido Regionalista de Cantabria (PRC), formación política que lidera Revilla, han declarado que no tienen "conocimiento" del procedimiento más allá de lo publicado en los medios de comunicación.
Procedimiento judicial en marcha
Fuentes judiciales han confirmado que la solicitud de conciliación fue presentada este martes en el decanato de los Juzgados de Primera Instancia de Santander. No obstante, el escrito aún no ha sido registrado ni repartido, por lo que se desconoce cuál de los juzgados asumirá el caso.
Este procedimiento representa un nuevo episodio en la intensa relación entre Juan Carlos I y sus críticos, en un momento en el que el rey emérito continúa residiendo en Abu Dabi, lejos de la vida institucional de la monarquía española. Revilla, conocido por su estilo directo y sus críticas abiertas a la Corona, podría ahora enfrentarse a una demanda si no accede a rectificar sus palabras en el acto de conciliación.