La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), Comisiones Obreras y UGT tienen previsto presentar un conflicto colectivo ante la Agencia Tributaria (AEAT) en busca de mejoras laborales y salariales, justo en el arranque de la campaña para la declaración de la renta.
Este conflicto colectivo, cuya formalización está programada para mañana, busca reactivar la negociación para un nuevo convenio colectivo, denunciado desde hace año y medio, así como un acuerdo para la carrera profesional, pendiente de desarrollo desde el año 2007. «Si no se atienden nuestras reivindicaciones desde la Agencia Tributaria, nos veremos obligados a convocar movilizaciones y no descartamos la huelga en plena campaña de la renta«, advierte CSIF.
Entre las demandas de la plantilla de la Agencia Tributaria se incluye el desarrollo del teletrabajo y la negociación sobre la apertura del servicio telefónico anunciado por la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, sin concretar retribuciones ni regular los puestos de trabajo. CSIF alerta que, de no reforzarse la plantilla, los trabajadores que atiendan por las tardes se retraerán de las actividades contra el fraude.
Además, el sindicato considera necesario revisar el sistema de productividad, que privilegia al colectivo de inspectores, discriminando al resto de la plantilla. También se reclaman mejoras en las condiciones laborales para el colectivo de Vigilancia Aduanera, catalogado como profesión de riesgo, así como el refuerzo de medios materiales y humanos para desarrollar una verdadera Policía Fiscal, una necesidad evidenciada tras sucesos recientes en la provincia de Cádiz.
Comisiones Obreras destaca que este conflicto colectivo busca visibilizar las deficientes condiciones de trabajo en una organización crucial para el funcionamiento del Estado, la lucha contra el fraude fiscal y la lucha diaria contra el narcotráfico y el crimen organizado.