Última hora

Marinas y paisajes castellanos de Ignacio del Río en el barrio de Las Letras

Un éxito que obligó a alargar. Madrid acogía desde el 21 de marzo hasta el 21 de abril la obra del pintor Ignacio del Río. El espacio contemporáneo Yuriko Yamamoto (C/ Alameda, 3) prorroga hasta este 15 de mayo  la exposición de pinturas al óleo que representan marinas, tauromaquias y paisajes ensoñados de Castilla.

"Ama y pinta, pinta y ama", así describe Eliseo González a este pintor de Burgos nacido la última noche de julio en 1936. "Desde muy joven, la pasión por la pintura es la invención de su destino: Una apuesta vital por crecer en un medio difícil, donde el oro del talento no basta para comer, pero sí para crear y sufrir, mientras día a día, a fuerza de ilusión y de trabajo, el pintor alcanza su plena madurez. Entretanto, como un rompecabezas que el viento fuera ordenando, la vida de Ignacio es un osado remolino de emociones: Ama y pinta, pinta y ama, al mismo tiempo que aprende y olvida los nombres de todo cuanto va quedando atrás en el camino: Mujeres, países, amigos, ciudades".

Reconoce González que la que hace no es una biografía convencional y que debería haber contado que sus pinceles pasaron por Grecia, Francia, Holando o que triunfó en Nueva York. "Pero Ignacio es algo más que un puñado de líneas intentando vagamente constreñir una vida. A pesar de los pesares, a pesar incluso de sí mismo, en el corazón de Ignacio sigue latiendo un niño. El niño que, por primera vez, hace muchos años, descubrió la realidad y decidió llenarla de fantasmas, con luces encendidas, con sombras apagadas y un buen ramo de heridas de colores".

E.D.