El primer asalto de este Euroderbi se lo ha llevado el Real Madrid gracias a los goles de Rodrygo y Brahim, pero, con el resultado final de 2-1, los de Ancelotti no deben confiarse si quieren estar en los cuartos de final de la Champions League.
Y es que no pudo empezar mejor la noche para los madridistas, que vieron cómo Rodrygo, en el minuto 4 de partido, le ganaba la espalda a un Javi Galán muy blando y adelantaba a los blancos con un golazo con la zurda. De hecho, ni dos minutos después, el propio Galán estuvo cerca de cometer penalti sobre el brasileño, lo que hacía presagiar otra noche de pesadilla para el lateral.
Pero, tras el gol, el Madrid se apagó. O lo apagó el equipo de Simeone, que empezó a tomar el control del partido con posesiones largas y acercamientos peligrosos a la portería de Courtois. Un centro de Giuliano estuvo cerca de acabar en gol, pero Valverde fue decisivo para despejar justo antes de que llegase Samu Lino.

Ya en el minuto 34, en una jugada casi en el lateral que parecía no tener peligro, Julián Álvarez se inventó un disparo que acabó en la escuadra para poner el empate y desatar la locura de las más de cuatro mil almas que estaban acompañando al Atlético en el Bernabéu, en un partido sin incidentes. De golazos iba la noche.
Los rojiblancos acabaron mucho mejor la primera parte, anulando completamente a Mbappé y Vinícius, dos jugadores que estuvieron desaparecidos prácticamente todo el partido.
Brahim iba a ser sustituido justo antes del gol
Tras el paso por vestuarios, el Atlético siguió dominando, tocando y presionando, buscando desarmar una defensa blanca muy bien posicionada. Pero, cuando mejor estaban los colchoneros, Brahim sacó un tiro en un metro cuadrado y con cinco defensas rojiblancos alrededor, que volvió a poner a su equipo arriba en el marcador.
A partir de ese momento, parecía que los dos equipos habían hecho un pacto de no agresión, porque no ocurrió nada más, excepto una jugada en la que Mbappé pudo dejar solo a Vinícius y decidió mal.
El miércoles que viene se decidirá en el estadio del Atleti qué equipo pasa a los cuartos de final de la Champions, en un partido en el que el Madrid partirá con cierta ventaja. Aunque los de Simeone han demostrado esta temporada que no hay que darlos por muertos nunca.