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Semifinales muy españolas en Montecarlo

Alcaraz y Davidovich pasan de ronda y se enfrentarán mañana sábado 11 de abril por un hueco en la final del Masters 1000
Pase lo que pase, habrá un español en la final. Fuente: ATP Tour en español/ X
Pase lo que pase, habrá un español en la final. Fuente: ATP Tour en español/ X

Habrá un español en la gran final de Montecarlo del domingo. Y es que tanto Davidovich, primero, como Carlos Alcaraz, después, han superado sus respectivos partidos de cuartos de final y se verán las caras en semifinales.

El partido de Alcaraz fue muy sufrido y, por segunda vez en tres encuentros, tuvo que remontar. El inicio no ayudó: empezó con un break en contra en su primer saque. Es la segunda vez en este torneo que el murciano arranca con malas sensaciones y un parcial muy negativo.

Esta vez, Carlos logró igualar el primer set 4-4 tras remontar, pero volvió a ceder el servicio y Fils se llevó la manga. Hubo hasta cinco roturas de saque en los primeros diez juegos, muestra de que ninguno de los dos se sentía cómodo al servicio.

La segunda manga estuvo igualadísima. Con 5-5 en el marcador, Alcaraz salvó tres pelotas de break que podrían haber sentenciado el partido. Pero no se rindió, mantuvo su saque y rompió el del francés para llevar el duelo al tercer set.

El arranque del set definitivo tampoco fue bueno para el español, que volvió a perder su servicio. Sin embargo, logró rehacerse rápidamente y, tras conseguir un nuevo break, no dejó pasar la oportunidad. Con gran determinación, se metió por primera vez en su carrera en las semifinales de Montecarlo.

No hay quien pare a Davidovich

Por su parte, el partido de Davidovich fue mucho más cómodo en el primer turno de la mañana. El malagueño se enfrentaba a Popyrin y lo derrotó en dos sets para meterse por segunda vez en su carrera en las semifinales de un Masters 1000.

Oportunidad para meterse por primera vez en la final de un Masters 1000/ X
Oportunidad para meterse por primera vez en la final de un Masters 1000. Fuente: ATP Tour en español/ X

Venía de un duelo muy exigente ante el número 6 del mundo el día anterior, que le supuso un gran desgaste físico, pero sobre todo mental, como él mismo reconoció tras el encuentro.

El partido fue parejo hasta el 3-3 del primer set. A partir de ahí, Davidovich despegó y Popyrin se fue del partido. El español encadenó siete juegos consecutivos: ganó la primera manga 6-3 y ya mandaba 4-0 en la segunda.

Poco pudo hacer el australiano ante una de las mejores versiones de Fokina, que mañana tendrá la oportunidad de seguir haciendo historia si consigue derrotar a su compatriota y acceder a la gran final.

Sin duda, el andaluz está demostrando que, cuando está centrado exclusivamente en el tenis, puede competir de tú a tú con cualquiera.